Una singular campaña se está desarrollando en España para concientizar a los hombres que asisten a prostíbulos sobre la situación de explotación que padecen las mujeres que ellos "consumen". Para ello se distribuyeron en hoteles y hosterías cinco millones de posavasos ilustrados por cuatro viñetas en las que se pone de manifiesto “la contradicción que supone albergar en nuestra sociedad rincones de esclavitud”, indicó la ministra de Igualdad, Bibiana Aído.
Por una de las caras de los posavasos se ha impreso el lema "No a la explotación sexual" y por el otro diversas viñetas con mensajes como "No es divertido ser cómplice de los proxenetas" o "Y yo que defiendo los derechos humanos... ¿Por qué ayudo a que los proxenetas se hagan ricos?".
Uno de los modelos muestran a varios jóvenes leyendo las páginas de contacto y un texto dice: "No es divertido ser cómplices de los proxenetas. Yo elijo tener sexo con mujeres tan libres como yo". En otro aparecen una mujer y un hombre que dice: "En ese momento comprendí que yo era una persona con todos mis derechos. Ella no. Y no volví nunca más".
"Es una de las mayores injusticias del mundo contemporáneo, dijo Aído en la presentación de la campaña. La ministra de Igualdad consideró que la iniciativa "contribuye a poner ante los ojos de la sociedad la que es una de las formas más antiguas de violencia de género, una de las más aberrantes formas de violar los derechos fundamentales de las mujeres: la explotación sexual".
Información suministrada por la Red No a la Trata
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